viernes, 19 de julio de 2013

Amor y otras drogas. Cargado de realidad

-Soy un capullo ¿vale? sé bien que soy un autentico capullo porque... porque yo nunca... yo nunca me he preocupado por nadie ni por nada. Esa es la verdad. Y todo el mundo más o menos lo aceptaba. Decían ¡bueno él es así!... y llegas tú joder... tú... tú... tú no me veías de ese modo. Yo nunca había conocido a nadie que de verdad pensara que yo valía la pena, hasta que te conocí a ti. Y tú lograste que yo también me lo creyera... Así que, por desgracia, te necesito... y tú me necesitas a mi.
+No, yo no.
-Sí, tú sí.
+No, yo no.
-Sí, tú sí.
+Cállate, por favor...
-Necesitas a alguien que te cuide...
+No... Yo no.
-Todo el mundo lo necesita.
+Yo voy a necesitarte más que tú a mi...
-...¿y qué?
+¡No es justo, eso no es justo!... Quería ir a tantos sitios...
-Y vas a ir, aunque quizás tenga que llevarte yo.
+No puedo pedirte que hagas eso...
-No lo has hecho... 
+...
-¡Eh! Imaginemos que en algún universo alternativo hay una pareja como nosotros ¿vale? salvo que ella esta sana y él es perfecto... y todo su mundo gira en torno al dinero que van a gastar en las vacaciones o... quién está ese día de mal humor o... ¡si se sienten culpables por tener criada!...yo no quiero ser esa pareja... nos quiero a nosotros... a ti...esto...

No hay comentarios:

Publicar un comentario